El paciente con diabetes puede presentar complicaciones propias de la enfermedad que son consecuencia de los niveles altos de glucosa en sangre, por ello la importancia de conocer y mantener un seguimiento continuo, tanto de la glucemia como de la HbA1c o hemoglobina glicosilada.
Sabiendo que la cantidad de HbA1c formada depende de las variaciones de glucosa que el paciente presenta en un periodo de tres meses (90 días) actualmente se la utiliza para el diagnóstico y seguimiento del paciente diabético.
Criterios actuales para el diagnóstico de diabetes:
► HbA1c mayor o igual a 6.5%.
► Glucemia en ayunas mayor o igual a 126 mg/dl (con un ayuno mínimo de 8 horas).
► Glucemia al azar, en cualquier momento del día, mayor o igual a 200 mg/dl.
► Dos glucemias mayores o iguales a 200 mg/dl en la prueba de tolerancia oral a la glucosa.