Las enfermedades cardiovasculares (ECV) como los ataques al corazón (IAM) y los accidentes vasculares cerebrales (ACV) son la principal causa de muerte en todo el mundo.
Existen factores de riesgo que desempeñan un papel importante en la probabilidad de que una persona padezca una enfermedad cardiovascular. Algunos de estos factores de riesgo se presentan juntos en ciertas personas. Esta conjunción de factores de riesgo se denomina Síndrome Metabólico.
El Síndrome Metabólico ha alcanzado en los últimos años una magnitud de epidemia.
¿CUÁLES SON ESTOS FACTORES DE RIESGO?
Los síntomas más frecuentes son:
► Obesidad abdominal
► Circunferencia de cintura aumentada
► Hipertrigliceridemia
► Triglicéridos por encima de 150 mg%
► Col- HDL bajo, menor de 40 mg% en hombres y menor de 50 mg% en mujeres
► Tensión arterial elevada, mayor de 130/80 mmHg
► Alteraciones del metabolismo de la glucosa. Glucemia en ayunas mayor o igual a 110 mg%
Sin embargo, tanto en niños como en adultos, los síntomas pueden ser atípicos o estar ausentes, dificultando el diagnostico.
Se requieren tres de los cinco criterios arriba mencionados para el diagnóstico de Síndrome Metabólico lo que aumenta el riesgo de sufrir un Infarto Agudo de Miocardio o un Accidente Cerebro Vascular.
¿QUÉ PODEMOS HACER?
► Ejercicio físico sistemático de tipo aeróbico
► Alimentación saludable
La inactividad física es un factor pronóstico de eventos cardiovasculares.
El médico del primer nivel de atención hasta el especialista debe intervenir para el diagnóstico y tratamiento oportuno del Síndrome Metabólico, revisando los niveles de glucosa, HDL colesterol y triglicéridos mediante análisis de sangre; la presión arterial y el peso corporal que son signos de advertencia del Síndrome Metabólico con el objetivo de disminuir la incidencia de enfermedad cardiovascular que siguen cobrando miles de vidas cada año y provocando incapacidades en personas en edad productiva.